El descontento en los barrios es cada vez mayor

Desde Barrio Industrial, pasando por La Carmencita, Barrio Norte, el sur y las localidades del sur, es notorio el aumento de la queja vecinal por la falta de mantenimiento de calles, la inseguridad que se vuelve diaria con diferentes hechos y modalidades en todos los rincones del distrito, como también un trabajo de limpieza y orden urbano que no alcanza a cubrir las expectativas de la ciudad turística que es Villa Gesell. Fotos y videos compartidos todos los días por vecinos y vecinas, que también llegan a este medio, demuestran que los barrios están detonados y que la gestión municipal no termina de solucionar en profundidad las problemáticas usuales que enojan a todos por igual. «¿Qué es lo que puede pasar cuando los vecinos se cansan?», se preguntó a modo de introducción en una carta para correo de lectores que envió a este medio, alguien que se catalogó como «un vecino cansado de la querida Villa Gesell».

«El corralón desde diciembre no pasó la maquina y las calles del barrio Norte son un desastre (solamente existe para cobra los impuestos! ) Si estuviera todo correcto no nos quejaríamos!!! UNA VERGUENZA. . ..y tenemos 50 años de propietarios «no residentes», se lee un uno de los grupos de whatsapp de todo Gesell, que abundan y terminan siendo una oficina de reclamos por los servicios no prestados o mal prestados por la municipalidad.

«Pasaje costanero y 201. No se termina de ir el agua que se llena con la próxima lluvia», advierte una vecina de Barrio norte a este medio mientras comparte una imagen de lo que detalla y asegura que reclama al corralón «hace dos años».

Otra vecina, evidencia lo que sucede en Paseo 103 entre 21 y 23 y asegura que «siempre que llueve se inunda mal, años y nada cambia, te envío fotos, capaz si lo publican algo cambie».

«Siempre que llueve quedamos así, días hasta que absorba el agua, ya que no corre el agua y se imposibilita circular», reclama.

En una publicación de este medio de la sección Imágenes que Hablan, donde se ve el video que un vecino de Barrio Industrial compartió con el estado de abandono de la garita de la policía en Paseo 143 y Avenida 14, otro vecino comentó: «Todo el barrio está en estado de abandono».

Fueron los vecinos de este barrio los que optaron por no esperar a la municipalidad y a la policía y pusieron manos a la obra para limpiar la garita policial que quedó en un total estado de abandono y suciedad.

Muchos de los que habitan en Barrio Industrial denuncian que hay mucha basura por todos lados, que la plaza no está mantenida y además ponen énfasis en la cantidad de hechos delictivos y encuentros ruidosos a altas horas de la madrugada que generan molestias a los vecinos más cercanos.

Por el Barrio de La Carmencita, también una plaza roída por la desidia le cambió el humor a muchos vecinos, que ponen de si para mejorarla, se repite también la postal de basura y montañas de ramas prácticamente en todas las cuadras. pero el problema más relevante lo evidenció la Unión Vecinal Villa Gesell hace un mes, que denunció un desborde de líquido cloacal en la zona de Avenida 24 y Paseo 105 cortado, que hacía una semana que causaba problemas y emanaba fuertes olores.

Monte Rincón también está en el ojo de la tormenta, no solo por los canales que se profundizan con sus aguas contaminadas, denunciadas también por los vecinalistas, sino porque es una zona en pleno loteo municipal y de un privado, que ha sufrido una extracción de arena inmensa y reclamada por vecinos en muchas oportunidades. Además, en Avenida Circunvalación y Paseo 109 ha sido un punto de alto conflicto ambiental cuando en pleno verano, el municipio abordó la tala de muchos árboles añosos de un espacio verde, de los que quedan poco y nada en la zona, para seguir avanzando con la losa de lo que se promete hace 7 años como un «futuro hospital».

En Las Praderas, barrio informal urbanizado gracias al aporte del gobierno nacional en la era Macri/Vidal, las obras prometidas quedaron paralizadas y actualmente, una referente de un comedor del barrio espera que por lo menos cambien las lámparas quemadas del alumbrado público que convierten a una parte del barrio en una «boca de lobo» y favorece los robos.

El sur de la ciudad y las localidades del sur abundan sus reclamos en la falta de mantenimiento de las calles, ya que solo se mantienen las avenidas principales. «Mínimo una vez por año tenés que hacerle el tren delantero al auto», expresó un vecino en una reunión, en la que el resto compartió la afirmación. Pero no es solo esa la problemática que los aqueja, la inseguridad es la más preocupante. Durante el verano no se difundieron todos los hechos delictivos que hubo y ahora se van conociendo más, ya que las víctimas que están con más tiempo disponibles avisan en los grupos de whatsapp.

La situación de la basura en las calles, el sistema de islas de separación y su recolección está verde aún y no solamente colapsó en verano, sino que hasta el momento no hay por parte del municipio un plan para poder trabajar con la comunidad seriamente la responsabilidad de una gestión responsable de residuos, como tampoco la realización de cartelería básica para contrarrestar el desconocimiento o impulsar la preocupación y la ocupación para colaborar a minimizar la problemática.

Las calles intransitables e inundadas también fueron motivo de reclamo y gestiones en la municipalidad por parte de vecinos de calles como el Paseo 148.

Los barrios aledaños al centro geselino no se salvan de las mismas problemáticas que el resto y es clave lo que sucedió con la obra de la Plaza de las Américas, finalizada en el mes de diciembre contra reloj para la temporada, donde vecinos alertaron que aún, hay sectores sin terminar, con desperdicios de obra que no solo afean el espacio que con la remodelación perdió mucho verde, sino que pone en riesgo a los chicos y chicas que la frecuentan.