En un mar de cervezas artesanales, Aquenia surfea con éxito deslizándose entre siete sabores para deleitar

El emprendimiento de cerveza artesanal en Villa Gesell comenzó hace 6 años con un sabor tradicional, Blond Ale. Hoy, ya son 7 los estilos que ofrece para satisfacer los gustos de los amantes de la bebida preparada a base de cebada. Sin químicos ni conservantes, Aquenia realiza una producción sostenible.

En la actualidad, la cerveza artesanal es consumida cada vez por más personas y es sin dudas la más elegida a la hora de organizar eventos gastronómicos, tanto públicos como privados.

Cerveza con aire de mar

En Villa Gesell, localidad costera argentina, Aquenia es una de las favoritas de los habitantes y turistas geselinos y de las localidades del sur. En los seis años que el emprendimiento que llevan adelante tres amigos, Santiago Busteros, Gastón Mascherpa y Santiago Esteller, los estilos pasaron de la clásica cerveza rubia a un abanico de sabores.

Golden, Scottish, Porter, APA, IPA, Amber Ale y Honey son las cartas de presentación de esta producción que por el momento solo se comercializa localmente, pero con un gran éxito que se afianza cada temporada de verano.

“Bien lupuladas”, como les gusta a sus creadores, las dos más vendidas son IPA (amarga e intensa) y Honey (con miel). Se comercializan en barriles de 50, 30 y 20 litros para bares o eventos y en botellas de 710 cm3.

El mercado es competitivo para pequeños productores como Aquenia, sobre todo por la fuerte presencia en la región de grandes empresas. Sin embargo, los emprendedores tienen como premisa la cocción artesanal, sin químicos ni conservantes. Esta forma de prepararla, asegura el placer de tomar una bebida alcohólica natural y que no cause malestar.

Producción amigable con el Medio Ambiente

De los 50 litros iniciales hoy ya elaboran 200 litros por cocción y el plan es seguir aumentándolos. En todas las etapas del proceso: preparación del agua, molienda de granos de cebada, maceración, cocción, fermentación, madurado, gasificación y envasado, se procura minimizar el gasto energético y el consumo de agua.

También, la práctica sostenible que caracteriza el emprendimiento tiene como premisa reducir los desechos. En ese sentido, una acción que se han propuesto los socios es donar más de 200 kilos de cebada por semana que quedan después de la maceración de los granos, para la alimentación de un chancho jabalí domesticado que vive en la casa de una familia de la zona.

En la constante búsqueda de un estilo propio, el estandarte de la marca es descubrir estilos que antes que nada les guste a quienes la elaboran. Como el mercado de cervezas artesanales geselino es muy bueno, los aquenianos saben que uno de los objetivos ineludibles es mejorar día a día y mantener la calidad.

Tres amigos que disfrutan de hacer cerveza cien por ciento geselina, ese es el espíritu de Aquenia y que transmiten a través de la variedad de sabores cocinados en un ámbito familiar y a partir de valores como la amistad, la conciencia ambiental y el deleite.