Estos desperdicios entre los que se ven claramente cubiertas de camiones o camionetas, muchas bolitas de telgopor, pedazos de ladrillos de telgopor, lonas y caños plásticos fueron descartadas en el último tramo de la calle 31, que fue abierta y no terminada debido a la medida cautelar que paralizó la obra del corralón municipal para las localidades del sur.
Si bien no hay certezas de quien pudo haber tirado esa basura de obra, se presume que podría ser proveniente de un camión o un volquete dada la cantidad y tamaño.
A menos de 200 metros del lugar se encuentra una batea roll off que puso el municipio para los residuos no convencionales, por eso llama mucho la atención que se haya descartado esta basura en la zona de conflicto donde la Secretaría de Planeamiento tuvo que parar los trabajos debido a la orden de un juez en respuesta al amparo presentado por vecinos de la zona.